Alexandre Charpentier (1856-1909). Naturalismo y Art Nouveau

Menos famoso que Gallé, Guimard o Gaudí, Alexandre Charpentier ha sin embrago desempeñado un protagonismo importante en la emergencia del Art nouveau. Su carrera es breve, un poco más de veinte años, entre su primer éxito en el Salón de 1883 y su última obra, en 1905.

Mientras tanto, el dramaturgo francés André Antoine y el abogado belga Octave Maus, habrán fomentado el auge del artista. En 1887, Charpentier dibuja los programas del Teatro libre fundado por Antoine y realiza los retratos de sus actores, autores y aficionados. Fue en 1890, en el Salón de los XX en Bruselas, que Charpentier fue reconocido como un artista innovador e inventivo.

Pero fue sobre todo en el Salón disidente de la Sociedad nacional de Bellas Artes, fundado en 1890, que hizo su reputación. A partir de 1891, se crea una sección de artes decorativas, bajo el impulso de Dalou. Charpentier mostrará aquí una gran variedad de creaciones. Experimenta todos los materiales y utiliza todas las técnicas: yeso, mármol, bronce, oro, plata, estaño, cinc, gres ceramo, loza, vidriera, mosaico, estampa, cromolitografía, papel gofrado, papel pintado, y por supuesto, pintura y dibujo.

Po otro lado, el excelente retratista, Charpentier representará más de quinientas personalidades de su tiempo, lo más frecuente en medalla, arte que contribuye a renovar.