Daumier

Daumier sigue siendo uno de los artistas más populares de su siglo: todo el mundo conoce a los burgueses panzudos, a los abogados turbios, al rey Luis Felipe I en forma de pera o a Ratapoil, el soplón imperial de sus caricaturas.
También se le conoce por sus esculturas de los bustos de los parlamentarios.
Pero lo que se ignora es que Daumier fue uno de los más grandes pintores y dibujantes de su época: la discreción del hombre y la dispersión de su obra en el mundo entero lo perjudicaron en cierta forma. Baudelaire, Delacroix, Degas y Picasso fueron sus admiradores, y esta retrospectiva permitirá entender por qué ellos lo tenían en tanta estima.