Machine humaine
Máquina humana puede considerarse como el primer torso moderno de Hoetger. La influencia de Rodin se combina aquí con la del realismo ya que el torso emerge de un marco constituido, de hecho, por los maderajes del pasillo de la mina. El artista crea un efecto del contraste acentuado entre estas maderas rectilíneas y el motivo orgánico del cuerpo. El bronce conviene particularmente a plasmar anatomías contraídas y torturadas.
El título hace referencia al mundo de la industria que aplasta al ser humano. Un minero de fuerte musculatura, casi sin rostro y sin brazos, se convierte, con la expresión exacerbada de su esfuerzo, en un icono de la miseria obrera y del drama de la humanidad. Hoetger, escultor alemán, se convierte de este modo, como Dalou en Francia y Constantin Meunier en Bélgica, en uno de los glorificadores del mundo obrero, de sus grandezas y miserias.