Maisons à pans de fer et revêtement de faïence
Este dibujo, publicado por Viollet-le-Duc en 1872 en sus famosos Entretiens sur l'architecture, se ha convertido en una imagen mítica, un verdadero icono arquitectónico. Los Entretiens, publicados entre 1863 y 1872, considerados como fundadores de la arquitectura moderna, son casi una biblia para arquitectos como Horta, Guimard, Gaudí y Sullivan. Para el siglo XVIII Entretien (1872), dedicado a la arquitectura privada, Viollet-le-Duc idea una estructura portante totalmente metálica, ya ilustrada en 1871-1872 para el molino del chocolatero Menier, erigido por Jules Saulnier en Noisiel (departamento del Sena y Marna).
El atrevimiento de Viollet-le-Duc consiste en aplicar este sistema a un edificio de viviendas, y dejar la estructura aparecer en plano y en voladizo. Una discreta policromía realza la fachada y la cuadricula, jugando con las armaduras de hierro, subrayando las líneas estructurales, la fusión de la estructura y de la decoración siendo una de las ideas primordiales del arquitecto. Pocos meses después de la caída del Segundo Imperio, propone de este modo una alternativa a la estética haussmanniana. El prefecto, había sido, en efecto partidario de un urbanismo en el que el respeto del gálibo, la alineación, la prohibición de los voladizos, el uso de la piedra y la ornamentación reducida, aseguraban la regularidad de la ciudad. Al contrario, este proyecto es un juego sobre los volúmenes, los colores y los materiales. Presentado como una fantasía, los detalles cuidadosamente dibujados de la joven mujer y de la vitrina, otorgan sin embargo al dibujo un intenso realismo.
A propósito de este estudio, Viollet-le-Duc afirma: "No tengo esta pretensión de dar este fragmento como un tipo de construcciones para futuros arrendamientos, como la arquitectura del futuro, sino como un estudio sin reminiscencias de los medios que nos proporcionan las industrias modernas, relativos al arte de la construcción". Posteriormente sin embargo, las normativas van a romper con el principio de la alineación y de la regularidad urbana. Las realizaciones de los hermanos Perret (edificio del 25 bis, calle Franklin, 1903-1904), de Frantz Jourdain (almacén n° 2 de la Samaritaine, 1903-1907), y de Henri Sauvage (edificio del 26, calle Vavin, 1912-1913), consagrarán el triunfo de la variedad arquitectónica, reanudando treinta años después con las ideas de Viollet-le-Duc.